El apartamento está situado muy cerca de la playa y de la estación de tren (la única pega sería que se oyen bastante los trenes, pero no circulan de madrugada). Es muy grande, está muy bien equipado y es realmente cómodo. Una familia de cuatro miembros tiene todo lo necesario para una estancia de vacaciones. La propietaria, Luisa, es encantadora y trabaja en el piso de abajo, por lo que está siempre accesible. Una situación estupenda para visitar Lisboa (25 minutos en tren), Sintra y Cascáis.